Puñetas en Público

Masturbándose en público desde junio del 2004.

viernes, septiembre 17, 2004

No particular place to go

Se conocieron en un supermercado, frente a las zucaritas piratas marca maizoro. Ella se llamaba Ofelia, él no. Nunca supe si vivieron felices para siempre, no me molesté en averiguar.


El último caballero de la orden de los templarios, descendiente directo de los que llegaron con Colón, murió ayer, atropellado por una pendeja que se iba pintando los pinches labios.


Le quité los cachetes con una navaja de peluquero, le arranqué las dos orejas y unos pedazos de la nariz (el cartilago tiene el mejor sabor). Le dí solamente agua por los proximos 4 días. Al quinto día le di un pozole que hize con sus pedazos. Era hilarante ver como se le salía el caldo por donde -ahora- no estan sus cachetes. It's pop art...eating itself.


Recorrió toda Europa trabajando de organillero con su changuito. Se iba a ir de tour por Argentina, pero se quedó sin lana porque tuvo que matar al pinche changuito. El muy cabroncito quería el 50% de las ganancias.


Me gustaría abrazarte, besarte, envolverte en un cobertor San Marcos y encerrarte en un cuarto muy oscuro durante tres años. Obviamente iba a cuidar que nadie te despertara.


Voya preguntarle a Martha donde puedo conseguir una caña de pescar para bicicleta. Chale, ya se desconectó.