Just another freak in the freak kingdom
Ya eran las tres de la tarde, no había hablado una sola palabra en todo el día, y decidí que era hora de salir. Tenía que comprar DVDs en blanco y un vino. Quería, no tenía.
No encontré las pinches llaves del carro, así que en mi encabronamiento, irme a pie me pareció buena idea. Yo no iba a depender de un pinche carro que probablemente no traía gasolina.
Llegué a SORIANA (todo lo demas estaba cerrado y Walmart estaba muy lejos) encontré los discos que necesitaba y luego me fui a buscar cheap wine para ahogar mi enojo.
Estuve viendo la triste selección de Soriana, cuando a mi izquierda veo un culo. Un culo grande. Muy grande. Un culo feo. Carajo, un culo MUY feo. Una terrible y criminal faldita extremadamente corta, dejaba ver toda la parte de abajo del culo de una tipa que también estaba viendo los vinos. Era trágico, era sucio, era una catástrofe. No podía dejar de verlo, igual que cuando estaba niño y mis padres me decían que no viera por la ventana del auto el cadaver en algun accidente de carretera: sabía que la imagen me iba a atormentar unos cuantos días, pero seguía viendo.
"Oyesss, ¿no me puedesss recomendar un vino? Tu te mirasss como que sabesss de esssasss cosssasss" me dijo en uno de mis intentos de voltear mi cabeza. Tenía unos labios gigantescos que terminaban en residuos blancos a la orilla de su boca, sus cachetes colgaban a los lados de su cara y sus ojos parecían solo dos hoyos en su craneo.
"Este esta bueno" le contesté, agarrando el primer vino que tenía enfrente, un Malbec argentino que nunca he probado.
La chica, que de chica no tenía nada, empezó a decir algo a lo que no le puse atención, porque yo metí mi mano a mi bolsa buscando mi celular, y sin sacarlo de ahí, me metí a la selección de timbres y lo hice sonar. Fingí contestar, y caminé al siguiente pasillo, donde inmediatamente me saca plática un viejo cincuentón, sobre cervezas.
"La pacífico esta muy mala, pero mira esta" dijo señalando un six-pack de Moosehead Light. "Esta muy buena y esta muy barata, mira, veintinueve pesos el six" señaló la etiqueta.
De seguro me va a decir que esta suavecita y ligerita, me puse a pensar, todo el pinche mundo piensa que suavecita y ligerita es algo bueno en una cerveza. A mi me cagan las cervezas suaves y ligeras, solo tomo algo light cuando no traigo muchas ganas de cerveza pero ya no alcancé a comprar vino.
"Esta muy suavecita, cae bien, esta ligerita" me dijo.
"Si, claro" le contesté y despues le señalé una etiqueta de oferta, diciendole "mire, aquí esta una etiqueta que dice que el six-pack esta en $24.90".
"¡Faltaba mas!" dijo feliz "me voy a llevar un doce".
Ignoré su comentario, regresé a los vinos, tomé una botella de vino chileno barato, del que añejan en alambiques de acero inoxidable, y rápidamente me dirigí a las cajas registradoras, porque todavía me esperaba la caminata de media hora de regreso a casa.
No llevaba mi cartera.